Portes Obertes del Catalanisme quiere apelar, nuevamente, al entendimiento y a la responsabilidad política e institucional en estos momentos tan graves y complejos debido a la Covid-19.
Creemos que ahora toca movilizar todos los recursos de nuestra sociedad para vencer la pandemia y para afrontar con determinación sus graves consecuencias.
Los esfuerzos de la Generalitat de Catalunya deben encaminarse, sin lugar a duda, a combatir la enfermedad desde el ámbito sanitario, proporcionando en la medida de sus posibilidades todos los recursos de apoyo a los centros hospitalarios, residencias de ancianos, centros de atención primaria y el conjunto del sistema sociosanitario catalán.
Asimismo, el gobierno de la Generalitat debe prepararse para hacer frente a las consecuencias económicas y sociales de esta gravísima crisis, poniendo en marcha las medidas de reactivación de la actividad económica cooperando sin reservas con el gobierno de España, el resto de CCAA y con las instituciones europeas . Si no somos capaces de controlar la caída de la actividad económica corremos el riesgo de nuevos retrocesos en la cohesión social que sufrirían especialmente las personas y los colectivos más desfavorecidos. Necesitamos, ahora más que nunca, una visión amplia de la política y las necesidades del país, haciendo un frente común para abordar los retos sanitarios, sociales y económicos.
La situación es, a nuestro entender, tan grave, que no nos podemos permitir el lujo de seguir con la retórica y la gesticulación de confrontación permanente de nuestras instituciones de autogobierno con el gobierno de España.
La defensa de un programa independentista, por legítimo que pueda ser, no puede servir en estos momentos para alimentar los agravios y amplificar los errores que unos y otros pueden cometer. Ningún gobierno, ningún gobernante, ninguna institución pública, del nivel que sea, se mueve hoy con certezas absolutas para hacer frente a una crisis del todo desconocida para todos.
Convertir la necesaria unidad en la lucha contra la Covid-19 y sus consecuencias en un nuevo conflicto político es, en nuestra opinión, un gravísimo error que aún podemos evitar.
Barcelona, abril de 2020
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