La crisis económica está afectando gravemente a las tasas de empleo de la OCDE, en especial, la de España. En términos absolutos, el número de trabajadores empleados al cierre del segundo trimestre en el conjunto de la Ocde fue de 560,4 millones de personas, lo que supone un descenso 34,2 millones de personas en comparación con los datos del primer trimestre. De esa cifra, 190,1 millones de personas estaban empleadas en la Unión Europea, 4,6 millones menos que el trimestre precedente. En el caso de España, la tasa de empleo al finalizar junio se redujo en más de cuatro puntos porcentuales, hasta el 58,9%. En total, el número de ocupados pasó de 19,646 millones en el primer trimestre a 18,331 millones en el segundo trimestre.
Según los datos difundidos este jueves por el organismo internacional, España es el sexto país con la tasa más baja de empleo de los 37 analizados en un contexto marcado por la crisis por el Covid. En el último año, la tasa de empleo española ha descendido en 4,4 puntos y un total de 18.331.000 personas se encontraban empleadas en el segundo trimestre. El registro de España es 5,7 puntos inferior al de la OCDE, que se anotó una tasa de empleo del 64,6%. También se encuentra 8,4 puntos por debajo del registro de las siete mayores economías (67,3%), a 7,9 puntos de la UE (66,8%) y a 7,3 puntos de la eurozona (66,2%).
Por grupos de edad, los jóvenes de 15 a 24 años anotaron la menor tasa de empleo en la OCDE (36,3%), frente a los trabajadores con hasta 54 años (74,7%) y los más mayores (59,3%). En España, la tasa de empleo juvenil se situó en el 16,5%, la tercera más baja por detrás de Grecia e Italia. Además, cayó en 5,8 puntos respecto al primer trimestre. La tasa de empleo de quienes tenían entre 25 y 54 años en España retrocedió hasta el 70,7% y la de quienes tenían hasta 64 años bajó al 53,6%.
En este sentido, el Fondo Monetario Internacional (FMI) no cree que España vaya a recuperar su tasa de paro previa a la pandemia al menos hasta 2026, es decir, siete años después de 2019, el año en el que la palabra coronavirus no era omnipresente. Y para este año y el próximo el panorama será especialmente malo, con una tasa del 16,8%. En 2021 se creará empleo, pero solo se recuperará uno de cada cinco empleos perdidos este año, siempre según las previsiones del Fondo. Tras la destrucción de 965.000 empleos que estima el organismo para este año, la creación de nuevos puestos de trabajo será de solo 187.000 en 2021, según sus economistas.
Y los datos podrían ser mucho peores. Los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) han logrado el efecto de contener la sangría del desempleo. Ahora hay 728.000 personas afectadas por ERTE, unos mecanismos de protección del empleo que el pasado abril llegaron a sumar 3,4 millones de trabajadores. Pero esta cifra previsiblemente va a aumentar con las nuevas soluciones que ofrece el decreto pactado el pasado mes de septiembre por el Gobierno y los agentes sociales.
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