Desde el inicio de la ola invernal de Covid, los países de Europa continental se han lanzado de nuevo a las restricciones. Letonia ha suspendido a los diputados no vacunados, Austria ha decidido confinar a toda la población y hacer la vacunación obligatoria y los Países Bajos ya han entrado en confinamiento parcial. El gobierno catalán se ha sumado a estas tendencias y ha anunciado imponer el pasaporte sanitario en la restauración.
Mientras, al otro lado del Canal de la Mancha, la vida sigue sin mascarillas, restricciones de aforo o pasaporte Covid. Todo esto, con un porcentaje de vacunación del 69%, equiparable al de Alemania, claramente inferior al de los Países Bajos y a años luz del de España.
El Reino Unido vivió su “día de la libertad” el pasado 19 de julio, cuando marcó el fin de todas las restricciones sanitarias. Y desde entonces, el país no ha dado marcha atrás pese al aumento de casos detectados desde el verano, mucho antes de que volviera el frío.
A raíz de su decisión única en Europa, vale la pena comparar la situación sanitaria del Reino Unido hoy respecto a la de los países del continente que han desplegado desde el verano una serie de nuevas restricciones.
Primeramente, en términos de contaminaciones diarias por millón de habitantes, después de meses liderando los rankings, últimamente el Reino Unido sale mejor que Austria o los Países Bajos. Se espera que Alemania le supere también en cuestión de pocos días.
La ausencia de restricciones desde el verano ha mantenido el número de contagios elevados constante, pero parece estar evitando al mismo tiempo una nueva ola en las últimas semanas.
La ausencia de restricciones desde el verano ha mantenido un índice de contagios elevados, pero parece estar evitando al mismo tiempo una nueva ola en las últimas semanas
En términos de mortalidad, Reino Unido ha ocupado una de las peores posiciones de Europa desde el inicio de la pandemia. Pero éstas son estables desde el fin de las restricciones, y actualmente la tendencia parece ir a la baja. Los datos se pueden consultar directamente en el buscador Google .
El Reino Unido ha sufrido uno de los mayores excesos de mortalidad de Europa desde el estallido de la pandemia. Pero como el gráfico inferior muestra, numerosos países europeos como España, Italia o Portugal le superan a pesar de haber impuesto desde marzo del 2020 muchas más restricciones.
Por último, en cuanto a las admisiones en los hospitales británicos por Covid, éstas se mantienen estables desde el verano. El número de pacientes en camas de UCI tampoco se ha disparado, y se encuentra muy lejos de los dos picos (el de la primera ola y el segundo y más importante todavía del pasado invierno).
El caso del Reino Unido parece apuntar que la vacunación de los colectivos más frágiles (en el Reino Unido están vacunados más del 90% de los mayores de 60 años), sumada a un mayor grado de inmunidad natural colectiva por haber pasado la enfermedad, permiten evitar el colapso de los hospitales de forma duradera. Ésta era ya la tesis del premier británico Boris Johnson en marzo del 2020, hasta que la presión le obligó a confinar el país.
Si bien claramente no todo son alegrías en Reino Unido, este país constituye un caso de estudio interesante que quizás -las variables son muchas- hubiera podido evitar la ola de restricciones que ahora amenaza a toda Europa en plena precampaña navideña.
Al otro lado del Canal de la Mancha, la vida sigue sin mascarillas, restricciones de aforo o pasaporte Covid. Todo esto, con un porcentaje de vacunación del 69% Share on X
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