Visiones de futuro sobre la UE (IV): El historiador Christopher Clark

Christopher Clark es un prestigioso historiador australiano residente en Inglaterra y Alemania. Es catedrático de historia de la Universidad de Cambridge.

Ha escrito libros muy importantes sobre Europa como  Sleepwalkers: How Europe Went to War in 1914 (Los sonámbulos: como Europa entró en guerra en 1914) o  Iron Kingdom: The Rise and Downfall of Prussia, 1600-1947 (El Reino de hierro: auge y caída de Prusia, 1600-1947), ambos de lectura obligada para entender la historia moderna europea.

Clark defensa encarnizadamente que hay que recuperar la fe en el proyecto europeo. Pide que confiemos en él y en su moderación política para recuperar la fe en el futuro que siempre ha caracterizado las democracias liberales. Opina que esta es la gran cuestión importante y urgente de Europa.

Clark piensa que el futuro, como el pasado, como la historia, sólo son ciertos en la medida que nos los creemos. Y si no nos los creemos, se mueren.

Si el proyecto europeo puede ser visto hoy por muchos analistas como moribundo es porque estamos dejando que los populistas -como Donald Trump o Boris Johnson- lo sustituyan por pasados tan gloriosos como falsos, para transformarlos en votos reaccionarios. A medida que perdemos la memoria del horror de las guerras, los populismos avanzan en su proyecto de dinamitar la UE desde dentro y desde los extremos. Los populismos reemplazan viejos futuros con nuevos pasados. Es el caso del América first de Trump que apel.la a un pasado que se inventa. Es el caso de Boris Johnson y los brexiters con sus glorias imperiales caducas y ridículas. Es el caso de Orban con las supuestas glorias de su Hungría medieval. Y tantos otros.

Clark ve la UE como una formidable máquina para generar prosperidad y repartirla de manera creciente, progresiva y visible para todo el mundo. Necesitamos un centro político europeo humilde, abierto a todos e integrador. Es urgente porque ahora todos aquellos populistas la están machacando y lo identifican con una tecnocracia inútil de expertos. Lo tuvimos cuando se construyó la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA) en los años cincuenta del siglo pasado. Al poner en común las producciones de carbón y de acero, la guerra se hizo imposible. Y así se empezó a construir la paz y la prosperidad de la que todavía disfrutamos. Fue el inicio de la estrategia comunitaria de integración europea, que ha pasado por la creación de varias Comunidades Europeas hasta llegar a la actual Unión Europea (UE).

Es necesario que los europeos reivindicamos nuestro futuro que podemos construir juntos desde la moderación y el entendimiento que nos ha sacado del marasmo de la Segunda Guerra Mundial. Si no conseguimos que nuestro futuro vuelva a ilusionar a los europeos, los nacionalismos llenarán el vacío con sus pasados ​​»gloriosos».

El proyecto europeo es esencialmente un proyecto de paz y de prosperidad, construido sin radicalismos, desde la moderación y la sensatez . Siempre que los radicales se han impuesto en los gobiernos europeos, hemos ido a la guerra. Pero también hay que decir que la moderación y el centro no consisten en una tecnocracia alejada de la realidad. Necesitamos naturalmente una tecnocracia, pero sólo la necesaria, bien formada, democrática y con estrecho contacto con la realidad.

La UE se construyó sobre la memoria del horror y bajo los gritos de «no a la guerra», «nunca más esto», «nunca más una guerra entre europeos «. Por eso la UE es, sobre todo, un mecanismo transnacional de evitación de conflictos. El problema es que la gente la ataca por inoperante a medida que olvidan las guerras que la hicieron imprescindible.

Por todo ello, debemos reaccionar de manera proactiva y urgente para salvar la UE y las democracias liberales. Y esto debe hacerse volviendo a construir una ilusión de futuro y de confianza en la UE que sustituya las fantasías populistas del pasado. Y transformar todo ello en una prosperidad compartida.

Esta es la propuesta de futuro que nos llega de un gran historiador que hace suya esta máxima de los clásicos (Cicerón): historia est magistra vitae (la historia es la maestra de la vida).

Visiones de futuro sobre la Unión Europea (III)

A medida que perdemos la memoria del horror de las guerras, los populismos avanzan en su proyecto de dinamitar la UE desde dentro y desde los extremos Clic para tuitear

Els resultats electorals de Galícia i Euskadi perjudiquen o beneficien al Govern espanyol?

Mira els resultats

Cargando ... Cargando ...

 

Print Friendly, PDF & Email

Entrades relacionades

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Rellena este campo
Rellena este campo
Por favor, introduce una dirección de correo electrónico válida.

El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.