España presidirá la UE en el segundo semestre de este año. Esto significa presidir la institución del Consejo de la UE en sus distintas formaciones, con la excepción del Consejo de Asuntos Exteriores, que preside Josep Borrell, como Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad. Será la quinta vez que España preside la UE, desde 1986. La última vez fue en 2010 y la siguiente será, previsiblemente, en 2035.
Se trata de una presidencia rotatoria de carácter semestral
España inaugurará un Trío presidencial formado con las dos presidencias siguientes (año 2024), que ostentarán, respectivamente, Bélgica y Hungría. Los Trios son grupos informales de tres presidencias que se coordinan para dar continuidad a los trabajos de la UE a lo largo de un período de tiempo más largo que un semestre, un total de dieciocho meses, y tratan de fijar objetivos a más largo plazo para las distintas actividades de la UE.
La presidencia europea actual la ejerce Suecia, que forma su Trío con las dos presidencias anteriores, que estuvieron al cargo de la República Checa y Francia.
Esto le permitirá estar en campaña electoral y, al mismo tiempo, presidir Europa
La presidencia española de este año coincide con las elecciones generales españolas, que deben celebrarse antes de finales de año. El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, es perfectamente consciente de la importancia de esta coincidencia, y de las ventajas que puede sacar de ella. Esto le permitirá estar en campaña electoral y, al mismo tiempo, presidir a Europa.
Tanto si gana como si pierde en las elecciones generales, al final resultará igualmente triunfador. Si gana en las generales, porque lo habrá conseguido y, si pierde, porque puede buscar una victoria personal por elevación, apuntando hacia un alto cargo europeo.
Sánchez se ha ganado un sólido prestigio personal en las instancias europeas e internacionales. En Bruselas se comenta, entre bastidores, que podría ocupar cargos de tanta importancia como el de secretario general de la OTAN, que ocupa actualmente el noruego Jens Stoltenberg, o el de presidente del Consejo Europeo, la máxima instancia de poder en la UE, que ocupa actualmente el belga Charles Michel.
Pedro Sánchez acaba de entrevistarse en Pekín con el presidente Xi Jinping, dada su próxima presidencia de la UE. Fue el primer mandatario europeo recibido por el líder chino tras su reunión bilateral con Putin en Moscú. Xi Jinping recibirá en los próximos días, inmediatamente después de Pedro Sánchez, a la presidenta de la Comisión Europea, la alemana Úrsula ven de Leyen, y al presidente de Francia, Emmanuel Macron.
La próxima presidencia española de la UE llega en los finales de la actual legislatura europea (2019-2024)
Las próximas elecciones europeas se convocarán en el mes de mayo de 2024 y a continuación comenzará un nuevo ciclo legislativo de cinco años con una nueva Comisión Europea. Por este motivo, es considerada por los expertos como, una «presidencia escoba» o como una «presidencia de cierre» de temas.
La actual Comisión Europea comenzó muy centrada en torno a las transiciones verde/ ecológica (Green Deal) y digital. En los últimos años se ha dedicado particularmente a hacer frente a las dos grandes crisis que han supuesto la pandemia y la actual guerra de Ucrania.
Durante la presidencia española se examinarán y madurarán los grandes expedientes pendientes o en curso más importantes, que darán forma a la arquitectura de la UE de los próximos años. Uno muy relevante es la consecución de una autonomía estratégica por parte de la UE, en el marco de un escenario geopolítico global muy complicado, marcado por la rivalidad creciente entre Estados Unidos y China.
Se trata de poder jugar un papel relevante entre los dos grandes gigantes, tanto en términos de autonomía estratégica en todos los sectores clave -defensa, exteriores, economía, comercio, tecnología, salud, investigación- como en materia de poder mediador entre ambos grandes rivales. Esta cuestión va ligada a los posibles resultados prácticos de la Conferencia sobre el Futuro de Europa, que debería dar frutos institucionales de mejora en el proceso de toma de decisiones de la UE, que necesita una política común en exterior y defensa, entre otras políticas comunes como fiscalidad o investigación, para convertirse en un verdadero actor global.
Contenido de una presidencia rotatoria semestral
El contenido esencial de una presidencia rotatoria semestral de la UE consiste en una buena gestión de una gran cantidad de reuniones informales de ministros responsables de diferentes temas, junto a reuniones de los Representantes Permanentes o Embajadores de los 27 estados miembros de la UE frente a la misma UE, más una gran cita informal de Jefes de Estados y de Gobierno de los 27 estados miembros de la UE.
está prevista una Reunión Informal Ministerial sobre transportes, telecomunicaciones y energía en Barcelona
Aún no se ha hecho público el programa definitivo de actividades, pero ya se sabe que habrá veinticinco reuniones ministeriales repartidas por ciudades situadas en todo el territorio español. Por ejemplo, está prevista una Reunión Informal Ministerial sobre transportes, telecomunicaciones y energía en Barcelona, en cuyo seno seguramente se tratará, entre otros temas, sobre la finalización del Corredor Ferroviario Mediterráneo de transporte de mercancías.
Consejo Europeo Informal de los Jefes de Estado y de Gobierno
El tradicional Consejo Europeo Informal de los Jefes de Estado y de Gobierno se celebrará en Granada, precedido de una cumbre de la recién creada Comunidad Política Europea, nueva organización de la que forman parte todos los estados europeos, salvo Rusia y Bielorrusia.
El tema central de este importante Consejo Europeo será el de «la autonomía estratégica abierta» en Europa. Se trata de un nuevo concepto elaborado por la Comisión Europea, que parte de las principales vulnerabilidades estratégicas que la UE sufre en cuatro áreas clave principalmente –energía, alimentación, salud y tecnologías digitales– y las formas más eficaces de afrontarlas. Implica «cooperar multilateralmente en lo que se pueda y actuar de forma autónoma en lo que sea necesario».
La globalización ha hecho que la UE adquiriese algunas dependencias estratégicas con terceros países, que en los últimos años se han convertido en un riesgo relevante para el bienestar de la ciudadanía europea y la competitividad de las empresas europeas.
Shocks internacionales como la pandemia de la covid o la invasión rusa de Ucrania han perturbado las cadenas de suministro de material sanitario, semiconductores, energía y alimento, causando graves problemas de desabastecimiento, una crisis de precios y dolor social. «Los gobiernos europeos deben actuar de forma rápida contra esta amenaza».
En Granada se adoptará una Declaración conjunta que establecerá futuras prioridades estratégicas para la UE.
Estas actividades en España están lideradas por la Oficina Nacional de Prospectiva y Estrategia del Gobierno de España, en colaboración con la Oficina de Coordinación para la Presidencia Española de la Unión Europea. «En última instancia, nuestro objetivo será apoyar la creación de una UE más fuerte y resiliente que pueda garantizar la prosperidad y el bienestar de su ciudadanía en el nuevo orden global».
Por otra parte, está prevista otra cumbre, que interesa particularmente a España, esta vez entre la UE y la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (CELAC), que se celebrará en Bruselas. Ésta será la primera gran cita de la presidencia española, que presidirá el líder del Consejo Europeo, Charles Michel, y organizada mano a mano con España.
Los países de América Latina y el Caribe forman parte de lo que hoy se denomina «Sur Global», formado por un gran conjunto de países en vías de desarrollo situado en África, América Central y del Sur, Oriente Medio y partes de Asia. China y Rusia tienen políticas muy activas en el “Sur Global“, sobre todo China con su política llamada “Nueva Ruta de la Seda”, conocida como OBOR (One Belt One Road) por su acrónimo inglés.
La UE quiere contrarrestar la influencia china y rusa en el “Sur Global“ con nuevas iniciativas.
El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha declarado que España trabajará prioritariamente durante la próxima presidencia europea los siguientes temas:
«la transición ecológica, la transformación digital, las políticas sociales, la autonomía estratégica, la seguridad energética, las interconexiones, las relaciones con los vecinos del sur mediterráneos y latinoamericanos y las crisis migratorias».
Por su parte, el secretario de Estado para la UE, Pascual Navarro, ha declarado que «la autonomía estratégica y la Agenda Verde son prioridades de la presidencia española» y que «la gobernanza económica y las reglas fiscales interesan especialmente en España“.
Por razones de proximidad, España debería procurar terminar las negociaciones Andorra-UE sobre un acuerdo de asociación, que empezaron en 2015. Mónaco y San Marino las negocian al mismo tiempo que Andorra.
Durante la presidencia española de la UE, España tratará de minimizar los problemas que tiene planteados sobre la mesa por parte de la UE en varios campos.
Por ejemplo los referidos a gobernanza económica (déficit, deuda) y al funcionamiento del estado de derecho (funcionamiento del mundo judicial), y tendrá no sólo la oportunidad de influir y dar forma a la agenda del próximo ciclo europeo de cinco años a partir de 2024, sino también dar visibilidad a la Península Ibérica como puente natural entre la UE y América Latina, África y el Mediterráneo en un momento geopolítico convulso que camina hacia un nuevo orden mundial.
No se pueden sobrevalorar las expectativas de una presidencia semestral europea, consistente esencialmente en la gestión de una serie de reuniones de alto nivel, pero tampoco se pueden devaluar las expectativas de forma exagerada.
En cualquier caso, España tratará de hacer los deberes, respetando una regla de oro propia de todas las presidencias europeas: gestionar bien los temas que benefician al conjunto de la UE y no pasarse en la defensa de tus propios intereses.
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Víctor Pou es doctor en derecho y licenciado en ciencias económicas por la Universitat de Barcelona, MBA por la IESE Business School de la Universidad de Navarra y Graduado en Integración Europea por la Universidad de Ámsterdam. Es profesor del IESE Business School y de la Universidad Internacional de Cataluña (UIC). Es Socio de la consultoría TAS Europrojects (Bruselas). Ha sido Ninguno de Unidad y Consejero de Relaciones Exteriores a la Comisión Europea (Bruselas). Ha sido Director del Patronato Catalán pro Europa y Director General de Adecuación a las Comunidades Europeas de la Generalitat de Cataluña.