La supermanzana de Barcelona situada en el Eixample se ha convertido en uno de los grandes caballos de batalla de la pugna electoral. De realizarse esta, trastornaría gravemente a la ciudad. Por esta razón, la alcaldesa Colau nos muestra testimonios de otras ciudades con el fin de cantar excelencias de las supermanzanas, como si fuera la idea la que recibe las críticas, en lugar de lo que están haciendo y cómo lo hacen en el caso de Barcelona.
Porque el método “Colau” de la implantación de la supermanzana de Barcelona es el acreditado de “a la brava”, entendida la expresión como “rápidamente, con descuido, de manera tosca y soberbia”, que todo cabe en ella. Seguir leyendo