¿Qué nos pasa a los catalanes? Hemos pasado de tener un presidente elegido a dedo a otro vicario y a un tercero en funciones, tan funcional que ni siquiera le permiten tener despacho en el Palau de la Generalitat, que es territorio de JxCat. Por no tener, no tenemos ni siquiera presidente del Barça .
Nuestros indicadores económicos son incluso peores que los de España, que ya es decir. El repunte que se produjo en verano de un -15,7% en términos intertrimestrales fue inferior a la media española. Está claro que es mejor expresarlo en términos anuales ya que el intertrimestral da una idea engañosa. En realidad, mirando en relación con el año anterior el tercer trimestre significó una pérdida del PIB de -9,1, el segundo trimestre de -21,2 y el primero de – 5,4. Siempre con datos del IDESCAT. Hay que recordar que en estos mismos términos interanuales la caída española fue de – 8,7 y la de la UE de un -3,9. La pregunta es ¿por qué caemos más que España, y lo hacemos de manera tan estrepitosa si la comparación es con Europa? La explicación del turismo es evidente, pero no es suficiente ya que en el conjunto español es una actividad aún más principal. Seguramente deberíamos buscar la respuesta del diferencial de 1 punto o medio negativo en la gestión que la Generalitat hace de la crisis, y sus medidas que por un lado son muy duras, de otra aplican con compensaciones de miseria, y por tanto el daño económico es grande, ya la vez tienen un efecto muy lento en el control de la pandemia. Hay un importante error de gestión que vamos a pagar.
Además llueve sobre mojado, porque esta crisis pandémica incide sobre una lenta decadencia de determinados aspectos económicos que el turismo ha disimulado. Es el caso de la industria que ya empezó a caer a finales de 2018 y que cuando ha llegado la nueva crisis no había recuperado el pulso.
Y todo esto se produce en la comunidad autónoma que tiene más capacidad de gestión con diferencia. Según el ministerio de Política Territorial, Cataluña es el territorio que tiene más competencias traspasadas, 189, seguida a distancia de Andalucía y Galicia, con 154. Madrid tiene prácticamente la mitad, 95, el País Vasco 113 y Navarra, comunidad foral como el País Vasco, sólo 60. la pregunta del millón es: ¿en qué se nota esta amplitud de gestión de que dispone el gobierno de la Generalitat y quiénes son los responsables?
Estaría bien disponer del listado concreto de las 189 competencias y poner nombre y apellido, consejero, secretario general, director general, en frente de cada una de ellas. Así podríamos ver la fotografía de las personas que están conduciendo tan desastrosamente este país. Tanto que a estas alturas del curso, por ejemplo, todavía se están esperando en las escuelas los ordenadores prometidos en verano por el Departamento de Educación. Sin ellos la desigualdad entre los alumnos, con más y menos medios, es patente. Suerte que es ERC quien dirige enseñanza.