Durante el mandato de Donald Trump, numerosos medios de comunicación, responsables políticos y comentaristaseuropeos afirmaban sin cesar que el republicano era el presidente de Estados Unidos más proteccionista y de rebote antieuropeo, de la historia reciente.
Sin embargo, las políticas de la administración demócrata de Joe Biden se están demostrando mucho más dañinas para los intereses económicos de la Unión Europea y de sus estados miembro.
Converses ya avanzó a finales de 2022 como la ley norteamericana bautizada “de reducción de la inflación” (IRA, por Inflation Reduction Act ), y que en realidad se basa en una política expansionista, podría ocasionar importantes pérdidas de inversiones para Europa.
Según ha podido informar el rotativo británico Financial Times, el IRA ya está efectivamente desviando a los fabricantes de baterías eléctricas y componentes hacia América.
El Doctor Chris Burns, director ejecutivo de la empresa de producción de componentes de baterías para vehículos eléctricos Novonix, admitió que los incentivos fiscales que la legislación estadounidense le ofrece han hecho que su hoja de ruta se centre en el mercado de Estados Unidos en vez del europeo.
Y no precisamente durante un período de tiempo corto: Burns afirma que las dos plantas de producción de grafito, elemento clave de las baterías eléctricas actuales, en las que Novonix trabaja en Norteamérica mantendrán su firma “más que ocupada hasta el final de esta década”.
Declaraciones como las del ejecutivo de Novonix deberían caer como un cubo de agua fría sobre los legisladores y funcionarios de la Comisión Europea dirigida por Ursula von der Leyen, que llevan ya cuatro años (mucho antes del anuncio de Biden) vendiendo el llamado Pacto Verde, la visión de una Europa líder de la transición hacia una economía sostenible y electrificada.
La realidad es que Europa se enfrenta a un inmenso desafío para construir la cadena de suministro necesaria para llevar a cabo el Pacto Verde sin depender de China.
La realidad es que Europa se enfrenta a un inmenso desafío para construir la cadena de suministro necesaria para llevar a cabo el Pacto Verde sin depender de China. Y ahora resulta que un nuevo y formidable obstáculo, además del dominio absoluto del gigante asiático en todos y cada uno de los mercados clave para extraer minerales y fabricar componentes desde baterías hasta paneles solares, procede del principal aliado europeo, Estados Unidos.
El caso del grafito que ocupa Novonix es particularmente revelador. Actualmente, y según Benchmark Mineral Intelligence, China controla el 75% de la cadena de suministro mundial del grafito, componente clave para el ánodo o polo negativo de las baterías de litio actuales.
Estados Unidos toma, pues, posiciones para repatriar en suelo nacional la mayor parte posible de la producción de este componente, mientras las empresas chinas sitúan sus esperanzas en la vieja Europa, dejada a su merced después de décadas de desindustrialización, y carencia de los capitales propios y de verdadera voluntad para desarrollar una filial industrial propia.
La realidad es que Europa se enfrenta a un desafío inmenso por construir la cadena de suministro necesaria para realizar el Pacto Verde sin depender de China. Share on X