Francia respira más tranquila tras la ola de gravísimos altercados de finales de junio que se cobrará más de 5.000 vehículos destruidos y un millar de edificios quemados, entre locales de las administraciones públicas y comercios saqueados.
Este episodio, como Converses ha expuesto , no se puede explicar precisamente por un nivel de desigualdad particularmente elevado: Francia es uno de los países con la distribución de la renta más igualitaria de Europa y el que más gasto social hace del mundo.
Francia se ha convertido en los últimos años en uno de los países más peligrosos de Europa
A pesar de esta constatación, los episodios del pasado junio no constituyen en absoluto hechos aislados, sino que dejan entrever una cruda realidad: Francia se ha convertido en los últimos años en uno de los países más peligrosos de Europa, con muchos índices de criminalidad que se sitúan entre los más elevados de la Unión Europea (UE).
Homicidios y robos
Vamos a las cifras concretas. En 2020, según datos oficiales del gobierno francés recopilados por Eurostat, Francia era el país con más homicidios totales (879), por sólo 719 en Alemania (a pesar de tener un 20% más de población) y 285 en España.
En términos relativos, Francia registró 12,9 homicidios por millón de habitantes contra 8,7 en Alemania y tan sólo 6,3 en España. Las cifras de Italia, «el país de la mafia», son todavía inferiores: 4,9.
Pero es que además la definición de homicidio que recogen los datos franceses es diferente a la española y alemana, ya que no incluye las “agresiones que conducen a la muerte” del individuo, hecho que evidentemente infravalora los números reales de homicidios en Francia.
Entre 2016 y 2018, siempre según las estadísticas oficiales facilitadas por Eurostat, Francia era el segundo país de la UE con más robos con violencia o intimidación, prácticamente empatado con el primero, Bélgica.
En este apartado cabe decir que España no sale demasiado bien parada: seguramente por el efecto turístico, el país se sitúa en tercera posición de este dudoso podio con unos 130 robos por 100.000 habitantes frente a los 150 de Francia y Bélgica.
Francia también era el tercer país en el que se registran más robos de coches, con 250 por 100.000 habitantes –cifra que supone en este caso más del triple que la estadística española (o alemana).
Una policía y un aparato judicial infradimensionados
A pesar de los aspavientos de la extrema izquierda y en particular de Jean-Luc Mélenchon, si la policía francesa actúa con contundencia es en buena parte porque carecen de medios.
En 2018, los países de la UE dedicaban de media un 2% de su gasto público a la seguridad, todos los niveles administrativos incluidos. En Francia, en cambio, y pese a la imagen de un país fuertemente policial, ese porcentaje caía hasta el 1,7%. En España, en cambio, subía hasta el 2,8%.
En cuanto al número de policías, Francia disponía de 3,3 por 1.000 habitantes frente a los 3,6 que encontrábamos en España. Viendo las estadísticas, es dinero que nuestro país invierte con gran éxito.
Pasando al aparato de justicia, y de nuevo en detrimento de la imagen que suele darse de Francia como un país con un exceso de funcionarios (que hay que añadir, es cierto en otros ámbitos de la administración pública, como los transportes o la cultura), Francia sufre un déficit de jueces.
Entre 2019 y 2021, la media europea se situaba en 18 jueces profesionales por cada 100.000 habitantes. Francia tenía tan sólo 11,1. Y en este preciso apartado España también sale mal parada, con sólo 11,2 jueces, aunque, como se ha visto a lo largo de este artículo, tienen significativamente menos trabajo que sus colegas franceses, al menos por lo que se refiere a los casos criminales.