Hoy en día, la mayoría de empresas, instituciones públicas y privadas, asociaciones, etc., utilizan la información de la que disponen, para hacer envíos masivos a través del email.
El problema es que la mayoría de estos emails muchas veces no se abren. El por qué tiene mucho que ver con la forma en que se hace.
Uno de los puntos más importantes de un mail es escribir un buen asunto para no pasar desapercibido en las redes sociales.
La importancia del asunto
El asunto es el factor clave que supone la diferencia entre el éxito y el fracaso total y absoluto de una campaña. Es verdad que influyen otros factores, pero el reconocimiento del que envía el mail es muy importante para generar confianza, conseguir que el correo aterrice en la carpeta de recibidos en vez de spam. Son muchos los factores que pueden influir, pero al final lo que va a hacer que el usuario se decida a abrir, es el asunto.
Un buen asunto debe de tener una serie de características:
1- Tiene que ser interesante para el destinatario
Muchas veces, cuando comenzamos con esto del email y nos planteamos cómo hacer mailing bien hecho, nos olvidamos de la parte más importante, la segmentación. Si se tiene una buena segmentación de nuestro público podremos hacer diversos asuntos que apelen a todos ellos.
2- Tiene que ser una llamada a la acción en sí mismo
Tiene que incitar al usuario a hacer clic en él y ver el resto del contenido.
3- Tiene que ser directo, no andarse con rodeos
Se debe explicar al lector qué va a encontrar dentro del mail si clica en él. Pero, a la vez, el asunto debe ser breve y conciso y debe entenderse en un golpe de vista que, al final, es lo que va a decidir al destinatario mirar el mail.
4- Tiene que ser veraz
Si un asunto nos dice que dentro del mail vamos a encontrar una iniciativa, una información e incluso una oferta, debe ser así. Es muy sencillo, el asunto es el reclamo, lo que va a hacer que un usuario abra el mail o no.
La captación de suscriptores
Existe infinidad de opciones para hacer crecer nuestra lista de suscriptores, desde las opciones offline (sin conexión), como la captación de contactos, hasta las diferentes promociones online que podamos generar. Lo habitual es usar algún tipo de formulario de suscripción. Puede ser la típica barra o formulario de suscripción, que aparece en algún lugar de la web.
El asunto es el factor clave que supone la diferencia entre el éxito y el fracaso de una campaña Share on X