Primer discurso sobre el estado de la UE de la Presidenta de la Comisión Europea

El título del discurso, pronunciado el 16 de septiembre por la presidenta Ursula Von der Leyen, era el siguiente: «Construyendo el mundo en el que queremos vivir: una Unión de vitalidad en un mundo de fragilidad».  

Fragilidad ha sido la palabra clave utilizada para Úrsula von der Leyen en su primer discurso sobre el estado de la UE ante el Parlamento Europeo. Según la Presidenta de la Comisión Europea, la UE se muestra frágil por la pandemia y no solamente por la pandemia, sus valores dan señales de fragilidad, Europa y el planeta en general se muestran frágiles en estos momentos.

Ante esta situación preocupante, su propuesta para la UE consiste en pasar de la fragilidad a la fortaleza. Para ello, plantea la necesidad de conseguir estos objetivos: 1) una UE de la salud más sólida, 2) una nueva política migratoria, 3) impulsar la recuperación y la transformación de la economía europea a través del Pacto Verde (Green Pact) y de la innovación digital, 4) impulsar la política medioambiental y la lucha contra el cambio climático, 5) defensa del estado de derecho, 6) relaciones más firmes con los vecinos en el marco de un escenario internacional desordenado, pero sin mencionar el replanteamiento de la política de defensa (tan necesario, como comentábamos en el Post anterior) ni los principales conflictos internacionales hoy existentes.

Sobre la salud, ha tratado del programa EU4Health dotado de garantías de futuro y una financiación adecuada, junto a una Agencia Europea del Medicamento (EMA) reforzada y de un Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) fortalecido. Se ha comprometido a crear una agencia europea de investigación y desarrollo biomédico avanzado. Ha pedido un debate sobre las nuevas competencias de la UE en el ámbito de la salud (puesto que las actuales son insuficientes), formando parte de la próxima Conferencia sobre el Futuro de Europa.

Sobre migración, Von der Leyen ha propuesto abolir el convenio de Dublín, el reglamento que regula el proceso de asilo en la UE. «Puedo anunciar que aboliremos el convenio de Dublín y que lo sustituiremos por un nuevo sistema de gobernanza europea sobre migración. Tendrá una estructura común de asilo y retorno y un nuevo mecanismo de solidaridad fuerte». Su propuesta adoptará «un enfoque humano». «Salvar vidas en el mar no es opcional; los países que cumplen sus deberes legales y morales y que están más expuestos que otros deben poder confiar en la solidaridad del conjunto de la Unión Europea».

Von der Leyen ha querido ser muy clara y contundente sobre el reforzamiento de la estrategia ya existente de impulsar la recuperación y la transformación de la economía europea a través del Pacto Verde y de la innovación digital. Un 57 por ciento de los 750.000 millones de los fondos de recuperación europeos irán destinados a estas dos áreas, con lo cual se constata que la irrupción de la pandemia no ha hecho cambiar las prioridades de fondo marcadas por la Presidenta en su discurso de investidura el mes de julio. La Presidenta insiste en la necesidad de avanzar hacia una Europa verde y una Europa digital. Los países de la UE participarán con sus proyectosLos que no lo consigan, quedarán atrasados. España y Cataluña deben tomar muy buena nota de este reto.

Pocos días después del discurso sobre el estado de la Unión, Bruselas ha publicado las orientaciones sobre la utilización de los fondos europeos antipandemia. El pilar principal de los 750.000 millones de euros es el llamado Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, con un total de 672.500 millones de euros. Las prioridades son claras: deben centrarse en las transiciones ecológica y digital. Para ello, se han fijado cuotas por áreas: un 37 por ciento del plan de recuperación de cada país debe destinarse al clima, sea para potenciar tecnologías limpias, uso de renovables, la mejora de la eficiencia energética de los edificios o el transporte público; y un 20 por ciento a la innovación digital, con gastos como el despliegue de la banda ancha, incluida la fibra y el 5 G, el desarrollo de procesadores de última generación o la adaptación de los sistemas educativos para apoyar la digitalización. De la parte más importante de este Mecanismo, 360.000 millones en transferencias a fondo perdido, a España le corresponden 59.168 millones de los cuales un 70 por ciento llegarían en los años 2021-2022, y el 30 por ciento restante, en 2023.

En el terreno medioambiental, ha anunciado un objetivo esperado, la propuesta de reducir las emisiones de efecto invernadero un 55 por ciento para el 2030, un paso que considera imprescindible para poder convertir Europa en el primer continente climáticamente neutro en 2050. «Reconozco que este incremento es demasiado para algunos y no suficiente para otros. Pero nuestro análisis de impacto dice que nuestra economía y nuestra industria pueden conseguirlo; es un objetivo ambicioso pero realizable y beneficioso para Europa».

Von der Leyen ha señalado que en Europa nadie se puede saltar el estado de derecho . «No toleraremos violaciones del estado de derecho». Ejemplo: no hay lugar en Europa para las denominadas «zonas libres de LGTBI», una crítica directa al gobierno polaco, en pleno recorte de los derechos de personas lesbianas, gays, bisexuales y transexuales. «Son zonas libres de humanidad y no tienen cabida en nuestra Unión».

También ha pasado revista a las relaciones con los vecinos . Por un lado, ha afirmado que la UE siempre intentará mantener buenas relaciones con los Estados Unidos, pase lo que pase en las próximas elecciones presidenciales estadounidenses. Ha invitado a «profundizar y refinar» las relaciones de la UE con Washington. «Pase lo que pase más tarde este año, estamos preparados para construir una nueva agenda transatlántica, para reforzar nuestra asociación multilateral, en comercio o en fiscalidad, y trabajar juntos reformando el sistema internacional que hemos construido juntos». También se refirió a China, país al que la UE ha categorizado en la cumbre reciente UE-China como «socio negociador, competidor y rival sistémico». Dijo que «las relaciones de la UE con China son una de las más importantes estratégicamente y una de las que más retos plantean». Sobre el Brexit, ha dicho que «no se puede descartar unilateralmente; debemos terminar las negociaciones con los británicos dentro de la ley, la confianza y la buena fe «. Por otra parte, tuvo palabras duras para Rusia, al considerar que el envenenamiento de Alexei Navalny no es un hecho aislado, sino «un patrón que hemos visto en Georgia, Ucrania, Siria y Salisbury».

Numerosos comentaristas han encontrado poco concreto y poco valiente la parte del discurso de la Presidenta dedicado a relaciones internacionales, alegando que no hace honor a su promesa de querer tener una «Comisión geopolítica«. Ya hemos dicho al principio que la defensa y los conflictos internacionales existentes (Siria, Libia, Turquía, gasoducto Nordstream 2 directo entre Rusia y Alemania, etc.) no han merecido la atención de la Presidenta. Ha hablado mucho de valores europeos, pero no ha contestado a la pregunta de qué pasará si son violados. Como mínimo, Von der Leyen ha invitado a los estados miembros de la UE a ser «valientes para permitir una rápida toma de decisiones respecto a situaciones internacionales difíciles mediante votaciones por mayoría cualificada en lugar de por unanimidad, tal como está establecido actualmente».

La crisis creada por la pandemia del coronavirus, la unidad entre los miembros del bloque, el estado de derecho, las transiciones ecológica y digital, más las relaciones de la UE con Estados Unidos y China, han marcado esencialmente el primer discurso sobre el Estado de la Unión de la presidenta de la Comisión Europea.  

A pesar de sus carencias, se puede decir que ha sido un discurso excelente, que termina con estas palabras inspiradoras: «El futuro será el que de él hacemos. Y Europa será el que los europeos queramos que sea. Así que dejemos de infravalorar Europa y pongámonos manos a la obra. Hagámosla fuerte. Y construimos el mundo en el que queremos vivir. ¡Viva Europa!»

Dejemos de infravalorar Europa y pongámonos manos a la obra. Hagámosla fuerte. Y construimos el mundo en el que queremos vivir. ¡Viva Europa! Share on X 

 

 

 

Print Friendly, PDF & Email

Entrades relacionades

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Rellena este campo
Rellena este campo
Por favor, introduce una dirección de correo electrónico válida.

El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.