- La sentencia del TUE. La sentencia de Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE) ha creado una situación absolutamente complicada, no sólo por su contenido, que en parte era de esperar, sino porque ha dejado en el aire toda precisión sobre las consecuencias, dado que la evaluación de los efectos vinculados a la inmunidad están sujetos a la interpretación del Tribunal Supremo español y no se conoce, por tanto, desde el punto de vista europeo, cuáles son los criterios sobre aquellas consecuencias y el alcance de las inmunidades en la actual situación de Junqueras, que no es la del momento del recurso -la prisión provisional- sino la de ser reo de una condena firme.
- La variable desconocida, los altos funcionarios del Parlamento Europeo. Un hecho mucho más sorprendente ha sido el de la velocidad con la que el presidente de Parlamento Europeo, David Sassoli, ha determinado que Puigdemont y Comín eran diputados y podían pasar a recoger la acreditación provisional. Un acto preñado de contenido político contrario a los intereses españoles, y que se concretó en menos de 24 horas desde que se produjo el fallo. Una velocidad sin duda extraordinaria. El golpe para el Gobierno de Sánchez ha sido extraordinario, y muestra su peso real en el concierto europeo, porque Passola pertenece al Partido Democrático italiano y por tanto al mismo grupo europeo que el PSOE. No sólo eso: el actual presidente fue elegido con los votos de los socialistas españoles. La explicación de esta dinámica inesperada la tenemos que buscar en un sector de altos funcionarios de la cámara, que interpretó la sentencia como un resultado a favor del europeísmo, en el sentido de que, a partir de ahora, queda claro que un diputado de esta cámara lo es al margen de los requisitos que fije el estado, y siendo sólo necesario haber sido elegido. En definitiva, el procedimiento acaba de pasar de los Estados miembros al Parlamento, y este grupo de funcionarios no quiere dejar pasar la ocasión para afirmar este aumento de autoridad del Parlamento en el caso concreto, que ha beneficiado a Puigdemont y Comín a riesgo de crear un conflicto político en el corazón de Europa. Esto explica el repentino arranque de europeísmo del ex presidente de la Generalitat cuando hasta hace pocos días desprestigiaba a la Unión Europea, incluso enviaba emisarios a la lejana Rusia. La discusión que mantuvo la línea de los socialdemócratas europeos, la española Iratxe García, con Sassoli está aún por escribir.
- El pacto está hecho, pero ERC dobla la apuesta. Por ahora, a 23 de diciembre, el pacto entre Sánchez y Esquerra se da por hecho, pero al mismo tiempo ERC ha introducido nuevas exigencias tras su Congreso. Que se resuelvan, o no, puede hacer tambalear el acuerdo, y en todo caso, su aplicación y consecuencias harán más difícil el gobierno del PSOE. ¿Por qué? Pues porque ERC lo que pide es que se extienda a todos los demás procesos que hay abiertos una interpretación generosa por parte de la Abogacía del Estado que está presente en todas las causas. Se trata de actuaciones judiciales abiertas en la Audiencia Nacional, el Tribunal de Justicia de Cataluña, en el Juzgado de Instrucción núm. 13 de Barcelona y el Tribunal de cuentas.
Son, por tanto, muchas causas que afectan a sujetos judiciales diferentes y que son difíciles de poder encauzar de acuerdo con la voluntad de ERC. Por lo tanto, nos encontraremos a partir de enero, no únicamente con la interpretación que se pueda hacer con lo que pase con Junqueras, más la situación de los otros presos, sino el continuo goteo de procedimientos, juicios y sentencias sobre causas vinculadas al proceso. Todo ello determinará un desgaste extraordinario para el PSOE, bien por la banda de ERC y el independentismo, bien por el lado de los partidos españoles. De todo este trato favorable, ERC no ha hecho mención del juicio más importante de todos, el de Trapero, al que consideran un desafecto a la causa independentista. - La resolución del caso Junqueras. Por ahora el tribunal que preside Manuel Marchena interpreta que el resultado del TJUE es de inaplicación práctica, porque llega cuando el político está condenando, todo lo contrario de lo que pide Esquerra. ¿Podrá subsistir el pacto con este resultado? Por otra parte, la Abogacía del Estado no pondrá en un compromiso al Tribunal Supremo porque constatará que no afecta al fondo de la sentencia del proceso. Pero sí asumirá que se vulneraron los derechos de Junqueras en el pasado, y en este sentido es posible que recuerde que la Abogacía ya pidió en junio que Junqueras pudiera salir de la cárcel para recoger el acta. Si este fuera el saldo final, la situación del líder de ERC continuaría a efectos prácticos como hasta ahora. El resultado habría favorecido, eso sí y de manera extraordinaria, a Puigdemont y Comín, es decir, a los que decidieron en un momento dado abandonar el gobierno y el país.
- La dependencia de Esquerra. Un último factor clave es que ERC tiene tres factores que la condicionan. El primero lo ha superado con nota y ha sido la celebración del Congreso, que ha avalado su política. El segundo es la utilización electoral que pueda hacer Puigdemont del pacto. Hay un acuerdo de no crear excesivo ruido durante el proceso de conversaciones. Pero una vez terminadas estas, sin duda abrirá la veda y la clave de la fecha electoral la tiene el hombre de Waterloo a partir de la figura subalterna de Torra. Cuando el ex considere que tiene el instrumento para ir a las elecciones a punto, condición que aún no se da, y vea que puede ganar el pulso a Esquerra, pulsará el botón rojo de la contienda electoral previo a la descalificación de los resultados del pacto de los republicanos. Esto Pere Aragonés y el resto de la directiva lo tienen muy claro. Y todavía queda una última condición. Para no ir a unas elecciones inmediatas, Aragonés necesita aprobar los presupuestos con la ayuda de los Comunes, pero éstos, incremento de la presión fiscal al margen, exigen para garantizar sus votos que ERC facilite la investidura de Sánchez. Si no lo hace, no habrá pacto ni, por tanto, presupuestos.