Las cifras absolutas son engañosas, sobre todo cuando el resultado no tiene en cuenta la dimensión real de lo que se está contemplando. Es el caso del desgraciado listado de muertes a causa de la pandemia.
Tomemos el caso de los EE. UU.: se sitúan ya en los 100.000 muertos y eso nos parece una brutalidad, pero claro, no pensamos en que este país en realidad es en sí mismo prácticamente un continente poblado por 328 millones de personas. Por esta razón es interesante compararlo con España con 47 millones de habitantes. El equivalente de la cifra estadounidense aplicada en España significaría que sólo tendríamos 14.000 muertos, prácticamente la mitad de los que tenemos, y el gobierno podría sacar pecho de manera más razonable de como lo hace actualmente, porque su número de muertos, aun siendo muchos, sería comparativamente pequeño.
Y podríamos hacer el mismo ejercicio en relación con otros países, por ejemplo, si España tuviera la misma proporción de población que Polonia, tendría sólo 1.255 víctimas.
Si la equivalencia se hace con Alemania, los muertos españoles por coronavirus serían prácticamente 6 veces menos que los que tenemos, 4.721.
Con Francia, la distancia ya no sería tan grande, pero seguiría siendo considerable. Si nuestros resultados hubieran sido los de los franceses, los muertos llegarían a los 20.000. E incluso en el caso que se ha visto como más trágico de Europa, Italia, las cifras españolas son superiores, porque si observáramos la misma proporción que la italiana, las defunciones debido al Covid-19 habrían sido 25.500.
España supera los 27.000 muertos tras el último gran «descuento» del doctor Simón, que hizo desaparecer más de 2.000 víctimas. En realidad, hay un intento desmesurado por parte de la administración española de no llegar a la simbólica cifra de los 30.000 muertos.
Pero maquillajes a parte, resulta evidente que los resultados españoles no son equiparables, por negativos, a los de ningún otro país. Ni con los que empezaron antes, ni con los que han sufrido la pandemia después, y esto merecería un análisis objetivo que nos explicara las causas de tanta mortalidad.
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