La media de encuestas de todo este verano señala tres hechos clave. El primero de ellos, que el PP mantiene la primera posición con 125 escaños y es una destacada ventaja en relación al PSOE. Porque éste, y ésta sería la segunda característica, cae por debajo de la psicológica barrera de los 100 escaños al alcanzar sólo 99. Vox por su parte no registra en términos negativos el ascenso del PP e incluso mejora ligeramente sus actuales 52 escaños porque pasa a los 54 diputados. Diferente es la suerte de UP que sigue sin levantar cabeza. Sus actuales 35 escaños aún se reducen más, hasta los 26, por lo que la otra fuerza izquierda que ocupa la cuarta oposición obtiene la mitad de representantes que Vox.
Más inalterable, según las encuestas, es el resultado de las demás formaciones. ERC se mantiene en los inamovibles 13 escaños, JxCat pierde 1, mientras que todas las demás fuerzas repiten los resultados actuales. Cs desaparece del escenario porque no obtiene ningún escaño.
Esta es la radiografía a partir de una media de encuestas. Puede compararse con la última que ha aparecido, que no está contemplada en este conjunto y que es la llevada a cabo por MC Report para La Razón.
En este caso, los resultados son aún mejores para los populares, porque alcanzan entre 140 y 142 y un 34% de los votos. Y al mismo tiempo resultan mucho peores los del PSOE porque queda lejos de los 100 diputados cuyo abanico se sitúa entre los 90 y 92 y un 23,8% del electorado. En esa hipótesis, el PP le estaría sacando 10 puntos de ventaja a Sánchez. Aquí sí se hace oír el tirón del PP en los resultados de Vox, porque solo logra entre 41 y 43 diputados, claramente por debajo de los 52 actuales. Donde no existe diferencia significativa entre la media de esta última encuesta es en los resultados de UP; 23-25 escaños y sólo un 9,7% de los votos. Si la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, no obtiene imprimir un cambio de signo, parece claro el declive de UP y su transformación en una fuerza por debajo de los dos dígitos.
La encuesta ha sido realizada el 28 de agosto y, por tanto, ya registra los continuos ataques por parte del Presidente del Gobierno y sus ministros contra Núñez Feijoo, que de momento parecerían tener un resultado más bien contraproducente.