Elecciones parciales en Alemania: el coste de la guerra de Ucrania

Las encuestas han acertado de lleno y las elecciones a los Länder de la Alemania del Este, Turingia y Sajonia, se han resuelto de acuerdo con lo previsto.

Resultados en Turingia

En el caso de Turingia, el resultado ha sido:

  • Alternativa por Alemania (AfD): 33,4%
  • Unión Cristianodemócrata (CDU): 24%
  • Alianza Sarah Wagenknecht (BSW): 16%
  • La Izquierda (Die Linke): 12%
  • Partido Socialdemócrata (SPD): 10%
  • Los Verdes (Die Grünen): 6%
  • Partido Liberal Democrático (FDP): 5%

Por tanto, el triunfo de la AfD ha sido claro, superando la CDU por 9 puntos. También es remarcable que la Alianza Sarah Wagenknecht haya alcanzado el 16%. Esta fuerza, una escisión de la izquierda de Die Linke, tiene muchos puntos de contacto con la AfD: ambas son contrarias a la guerra de Ucrania y partidarias de recuperar la buena relación con Rusia, rechazan la inmigración con contundencia y defienden una mejora de los salarios.

Estos tres puntos podrían hacer posible lo que en principio puede parecer contra natura: una alianza entre la derecha y la izquierda extrema, que alcanzarían prácticamente el 50% de los votos. La alternativa sería una gran alianza encabezada por la CDU y con los tres partidos del gobierno, pero ésta quedaría lejos del 50% de los votos. Además, tanto la socialdemocracia como los verdes y liberales son una losa electoral que tienden a restar.

Cabe subrayar la caída extraordinaria de la izquierda (Die Linke), que ha pasado de encabezar las anteriores elecciones y gobernar al Land al actual 12%.

Resultados en Sajonia

En Sajonia, los resultados han sido los siguientes:

  • Unión Cristianodemócrata (CDU): 31,5%
  • Alternativa por Alemania (AfD): 30%
  • Alianza Sarah Wagenknecht (BSW): 12%
  • Partido Socialdemócrata (SPD): 14%
  • La Izquierda (Die Linke): 8%
  • Los Verdes (Die Grünen): 7%
  • Partido Liberal Democrático (FDP): 4%

En Sajonia ha ganado por muy poco la CDU, con una diferencia de menos de 2 puntos respecto a la AfD. Estas dos fuerzas sumadas son claramente hegemónicas, superando el 60% de los votos.

A diferencia de Turingia, ni siquiera numéricamente tiene sentido una alianza de la derecha y la izquierda extremas, porque quedan lejos de la mitad de los votos. Algo no menor es que en este caso los liberales no tendrán representación en el Parlament, porque no han alcanzado el 5%.

El declive de los partidos gubernamentales

No es un dato menor que los tres partidos del gobierno hayan obtenido sólo entre 1 de cada 4 ó 1 de cada 5 votos emitidos. Esto hace muy difícil que no acaben avanzando las elecciones, porque la fragilidad del llamado gobierno semáforo —rojo, verde y amarillo (socialdemócratas, verdes y liberales)— es evidente.

Causas de la revolución política en Alemania del Este

¿Cuáles son las causas de fondo de este tipo de revolución política que se ha producido en estos dos Länder del este de Alemania? Hay unas causas estructurales. Por un lado, no se ha superado del todo la diferencia entre las dos Alemanias, la del bloque del este y el occidental.

A esto sele  añade que el mundo rural, importante en estos territorios, sobre todo en Turingia, se siente desatendido frente a las grandes ciudades. No es un fenómeno desconocido, porque tiene gran intensidad en Francia.

Por debajo de todo esto existe una parte de la población, que los estudios sociológicos sitúan en el 10%, que tiene una orientación autoritaria y xenófoba. También existe como factor explosivo determinante la reacción negativa hacia la inmigración.

La inmigración y la reacción política

La medida extrema y reciente de deportar a 28 afganos, pese al régimen talibán, que adoptó el gobierno alemán ante las elecciones, da una idea de cómo van las cosas. Hasta ahora, las deportaciones eran una palabra casi proscrita en la coalición del gobierno, aunque Alemania es uno de los países que más las ha llevado a cabo en el primer trimestre del año, junto con Suecia y Francia.

Por cierto, también España encabeza este ranking, pese al discurso del gobierno, que como nos tiene habituados, por un lado, va el relato y, por otro, la práctica, porque ha expulsado a cerca de 3.000 personas. Casi el triple de las que ha llevado a cabo el gobierno de Meloni en Italia, aunque los estereotipos de los medios de comunicación presenten unas imágenes inversas a los comportamientos reales.

A ello hay que añadir que Meloni ha logrado una reducción sustancial de la entrada de flujos ilegales, mientras que en España se han multiplicado.

La guerra de Ucrania y la crisis económica en Alemania

Pese a estos factores, el elemento que ha disparado las expectativas de los radicales y ha hundido al gobierno de coalición es la grave crisis económica que vive Alemania, instalada desde hace meses en la frontera de la recesión económica. La causa de esa pérdida del motor económico de Europa no es otra que la guerra de Ucrania y el conflicto con Rusia.

Rusia era un socio ideal para Alemania. Le aportaba energía con seguridad y a buen precio; de ahí los dos grandes gasoductos que unían directamente a ambos países (el segundo y más reciente fue saboteado por un grupo ucraniano). Asimismo, Rusia era un buen mercado para los productos industriales alemanes.

Esta asociación era tan importante que permitió a Merkel acordar una decisión revolucionaria: poner fecha para cerrar todas las centrales nucleares. Ahora, con el conflicto de Ucrania, el gas ruso no llega, el sustituto —sobre todo gas licuado de EE.UU.— es mucho más caro, y las exportaciones se han paralizado.

Efectos de las sanciones en Rusia

Es una paradoja. Las sanciones no han afectado a Rusia, que se ha abierto a otras posibilidades al margen de Occidente con China, India y el Sur Global, pero han hecho mucho daño al corazón industrial de Europa, a Alemania, y progresivamente sus efectos se notarán en toda la UE.

La guerra de Ucrania primero provocó un fenómeno inflacionario del que apenas estamos saliendo. Y, a continuación, ha generado una depresión económica. De ahí que ambos partidos, Alternativa por Alemania y la Alianza Sarah Wagenknecht, que llevan a su programa dejar de contribuir a la guerra y reconstruir la paz y la colaboración con Rusia, se hayan visto premiados en las elecciones.

Por lo que se ha apuntado, no es la única razón, pero sí es el catalizador final de una serie de factores que demuestran cómo el conflicto con Moscú está erosionando gravemente a la UE. Y recordemos que la erosión nunca es espectacular observada a corto plazo, pero es terriblemente destructiva y difícil de revertir si no se detiene.

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