La ANC, de la mano de FemCAT, ha intentado repetir su éxito en la Cámara de Comercio en una de las patronales más importantes de Cataluña, la metalúrgica, presentando un candidato, Joaquim Boixareu, consejero delegado del grupo siderúrgico Irestal, que irrumpió de forma inesperada en la contienda electoral de la asociación, enfrentándose a la candidatura oficial de Jaume Roura, propietario del grupo Lesseps Motor.
El resultado ha acabado con la retirada de Boixareu tras pactar un lugar en la junta para él, dejando la futura comisión ejecutiva en manos de la candidatura oficial.
La conquista de este nuevo territorio empresarial tenía además una importancia añadida, porque era la cabecera de puente para actuar en el asalto del Fomento de Trabajo cuando el actual presidente, Josep Sánchez-Llibre, finalizara su mandato. Era una buena plataforma porque es de las organizaciones que tienen peso en Fomento. Ahora esta vía ha quedado interrumpida y el independentismo ha visto frenado su avance hacia el control de las organizaciones que representan al mundo económico.