Las últimas encuestas no dejan lugar a duda, el PP registra un fuerte incremento y se distancia claramente del PSOE, al tiempo que Vox baja muy poco y UP continúa su proceso de reducción.
En concreto, la encuesta de Celeste-Tel para Onda Cero del 23 de junio da al PP 130 diputados por sólo 98 del PSOE, 49 a Vox y 21 a UP. Cs sólo lograría 1 escaño. Este resultado significa que la derecha superaría la mayoría absoluta con 179 escaños, mientras que la actual coalición de gobierno sólo dispondría de 119 escaños. Hay otros 52 escaños que se distribuyen entre varias minorías que no cambiarían el resultado final aunque inclinaran en bloque por el gobierno, lo que no se daría en todos los casos. En este colectivo minoritario, el grupo más importante lo aportan los catalanes, con 12 diputados de ERC y 8 de JxCat .
Una segunda encuesta, la de DYM, también del día 23, da un resultado similar, pero más favorable a los socialistas. El bloque mayoritario de la derecha obtiene 178 escaños, por 125 la coalición de gobierno, 2 para Cs y 47 para las restantes fuerzas políticas. En este caso no hay una base suficiente para dar los resultados de las minorías.
La tercera encuesta, la de Sigma Dos, del día 21, otorga la mayoría a las derechas, 180 escaños, 132 de los cuales son para el PP, y 123 de los partidos del actual gobierno Sánchez, 1 Cs y 47 del resto de partidos.
Como se puede constatar, el PP se mueve en torno al 30% de los votos, mientras que el PSOE lo hace alrededor del 25%. Vox se sitúa como orden de magnitud en el 15% y UP en un migrado 10%.
Estas encuestas no registran aún a fondo la reacción a la concesión de los indultos, pero si que recogen en buena parte los inicios de este gran cambio. Naturalmente el hecho de que no haya elecciones en perspectiva relativiza el significado práctico de estos resultados, porque si las elecciones son dentro de dos años el escenario puede haber cambiado mucho. Con todo, sí que hay un factor político que puede tener importancia: el actual Congreso, con respecto al juego de gobierno y oposición, no representa bien el estado de opinión que impera en la sociedad española y este puede ser un factor de desgaste continuado para el gobierno.
En una perspectiva a corto plazo, es muy importante cómo evolucione la pandemia después de haber declarado que estábamos a la puerta de la normalidad y, una vez más, ya lo hizo el verano pasado, que Sánchez haya salido presentando un panorama optimista sin matices. La vacunación puede contribuir a que realmente acabe siendo así, pero la variante india del virus unida a un cierto retraso en las previsiones de vacunación puede volver a complicar la historia de cara al otoño.
En definitiva, Sánchez de momento pierde claramente el partido pero en octubre empieza uno nuevo, cuando no será ajena la dinámica que se produzca en el independentismo. Todo será muy diferente si le hacen fácil la argumentación utilizada por Sánchez, de abrir camino hacia el diálogo y la concordia, o bien el independentismo, o al menos buena parte de él, decide aumentar la presión sobre el estado porque interpreta los indultos como una muestra clara de debilidad.