Este pasado domingo fue el último día que se podían hacer públicas las encuestas y se ha producido un alud. No todas tienen el mismo valor porque algunas vienen de empresas acreditadas y otras más dudosas.
Pero, en cualquier caso, sin entrar demasiado en esta cuestión el resultado de las 6 últimas encuestas llevadas a cabo por Sociométrica, el tracking de Sondaxe, DYM, Demoscopia, Gesop y 40dB, daría como resultado una victoria del PP, asegurándose con un margen estrecho la mayoría absoluta con 38 o 39 escaños sobre un total de 75.
El segundo puesto corresponde al BNG con 23 y, finalmente, los socialistas con 12 diputados. Puede entrar, pero ni mucho menos lo confirman todas las encuestas, Democracia Ourensana con 1 diputado para su provincia y no obtendrían representación ni Vox, ni Sumar, ni UP.
Estos resultados pueden tener algunas matizaciones. Una importante es la tendencia creciente al alza del BNG, que puede hacer peligrar la mayoría absoluta de los populares. Precisar los efectos es difícil porque se mueven a nivel de provincia y porque el BNG lo que hace es morder voto a los socialistas. Si bien hay que considerar el factor abstención que fue muy alto en las últimas elecciones, que ahora podría ser menor y no está claro en qué sentido iría ese flujo de votantes. Por lo menos no con los datos publicados.
Por tanto, el aumento de la participación puede liquidar la mayoría absoluta del PP o por el contrario consolidarla. Cabe recordar que hasta ahora en todas las elecciones en Galicia los populares han mejorado los resultados que le daban las encuestas. Está claro que siempre hay una primera vez.
El tracking continuado de Sondaxe merece una mayor atención porque este tipo de metodología suele precisar más los resultados. En los últimos datos le daba 39 escaños al PP, por 23 al BNG y los 12 de rigor a los socialistas. También podemos otorgar atención a la encuesta de 40db porque es la empresa que trabaja para El País y la Ser y, por tanto, la más próxima a interpretaciones desfavorables a los populares. En este caso otorgaba la mayoría absoluta raspada al PP, 38 escaños, por 24 al BNG y los 12, que parece una cifra muy estable, al PSOE. Sin embargo, esta encuesta presenta un dato que cuestiona el conjunto. El PP obtiene el 45% de los votos mientras que los socialistas y el BNG por separado obtienen otro 45% .
Pues bien, cuando se les pregunta qué gobierno preferirían, sólo un 29% dice que querrían un gobierno en solitario del PP. Por tanto, 16 puntos porcentuales, que es mucho, de votantes populares resulta que se inclinan por esta opción, pero no quieren que gobierne. Este resultado evidentemente no tiene lógica alguna, más cuando las alternativas de pacto del PP con otras, como puedan ser Vox, dan resultados aún menores. El bloque del BNG y el PSG sí obtiene un resultado consistente en la preferencia de gobierno porque alcanza el 46,5% que encaja con el orden de magnitud de estas fuerzas.
A parte de la cuestión clave, de si el PP mantiene o no mayoría absoluta para gobernar, hay un segundo factor que es absolutamente decisivo y que puede quedar enmascarado por el primero. Se trata del escaso resultado que logra el gobierno Sánchez; es decir, socialistas más Sumar, porque apenas llegan al 20% de los votos. Por tanto, en Galicia el gobierno español conseguiría un apoyo que a lo sumo significaría 1 de cada 5 votantes. Y esto es muy delgado y, pese a la especificidad gallega, puede anticipar un bajón en las elecciones europeas del 9 de junio. Naturalmente, si los populares pierden la Xunta el golpe sobre Núñez Feijóo será muy contundente y fulminará los malos resultados gubernamentales.
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