¿Puede existir una sociedad sin tradición y, en todo caso, cuál es la nuestra?
El destacado historiador británico y profesor en Harvard, Christopher Dawson, en su obra probablemente más importante, Dinámica de la historia universal (1961; 205), sostiene la tesis de que la esencia de la historia no hay que buscarla en los hechos, sino en las tradiciones porque el hecho puro en sí mismo no es histórico. Solo adquiere tal característica cuando puede relacionarse con una tradición social que permita, entonces, analizarlo como parte de un todo orgánico. Porque, sostiene Dawson, la cultura forma una unidad orgánica con sus propias tradiciones sociales y sus propios ideales espirituales. No es posible separar el hecho de la cultura, y esta tiene como fundamento la tradición y un determinado sustrato espiritual.